Al principio del siglo XVI, la isla de Cuba está rapidamente cercada por los conquistadores españoles.

Pero la isla gande solo da migajas de oro, sin realizar el sueño que hizo salir de España estos aventureros : ¿ valia la pena venir de tan lejos para convertirse en un campesino ?

Los mas audaces van a conquistar México. Pero los que se quedan en Cuba fracasaron la conquista, porqué nunca se han ido. Como sedentarios, sin el oro de México y con un pasado de guerrero sin gloria, se van a deslomar insistiendo sobre escasas plantaciones, matando de trabajo a los indios ya reducidos a esclavos.

Al llegar los Blancos, los Indios Siboneys ya estaban en vía de extincíon en Cuba. Los Indios Taínos, mas numerosos, van a proveer los batallones para trabajar los campos, en condiciones inhumanas.

La desorganizacíon de sus sociedades, las enfermadades, el agotamiento, van a decimar estas poblaciones. Bajo la presión de algunos - como Bartoloméo de Las Casas -, la Iglesia se va a oponer a la esclavitud de los Indios.

Los Europeos van a optar rapidamente por la solucíon africana. Desde entonces, las regiones del Golfo de Guinéa van a “ suministrar ” millones de esclavos negros : saldrán casi desnudos, puesto como cucharitas sobre los barcos negreros para un viaje sin vuelta : ellos y sus hijos nunca volverán a ver el continente africano.

Economicamente, la nueva fórmula tiene muchas ventajas ; los esclavistas las explotarán a su favor : los Africanos tienen constitución física mas robusta que los Indios, y son menos sensibles a las enfermedas transmitidas por los Blancos ; la instauración del comercio triangular (Europa, Africa, América) va a contribuir a hacer la fortuna de muchas ciudades ; y ademas los Negros... son negros, y facilmente identificables si un día consiguen escaparse y intentar sobrevivir en territorios totalmente desconocidos.

“El Negro”, no teniendo entonces, según la doctrina oficiál de la Iglesia católica, “un alma para salvar”, lo que se salva es la morál, y el sistema está instaurado para los siglos futuros...

Continuación

 
El encuentro


Los principios
de la historia